¡...Que Moreno pare eso!
Lo ideal fuera que la campaña se titulara: ¡Detengan eso...! Porque dicho
así: ¡Paren eso...! Pudiera tener otra connotación, una interpretación semántica
indeseable... Porque así de caprichoso es nuestro idioma.
De cualquier forma, el doctor Guillermo Moreno --tan pulcro en sus
expresiones y modales--, debería “parar eso...”. Y hablo específicamente de su
campaña contra el expresidente Leonel Fernández. Más aún después de su último
traspié judicial.
La Corte de Apelación reafirmó la decisión de la fiscal Yeni Berenice
Reynoso, de archivar para siempre la querella contra Leonel y Funglode que ha
interpuesto el propio Moreno en cuchumil cortes e instancias judiciales.
Pero no conforme, Moreno ha dicho que seguirá “elevando instancias” en la
Justicia insistiendo en que Fernández debe pagar por culpas que sólo existen en
su cabeza y en su propósito de figuración pública, sin importar el tiempo que
dure “su cruzada contra la corrupción”.
Parecería una fijación que, como he dicho antes, nadie veía desde mediados
del siglo XIX cuando Víctor Hugo concibió Los Miserables para poner a Javert a
perseguir impiadosamente a Valjean hasta que su propia conciencia lo condujo al
suicidio.
El doctor Moreno, que fue fiscal de Leonel después de haber sido ayudante de
fiscal de Balaguer, va decreciendo en la aceptación popular en la misma medida
en que aumenta su odio contra Leonel. Como si fuera Leonel el culpable de su
tragedia electoral.
El doctor Radhamés JiménezEl jefe del cuerpo de la defensa de
Fernández, Radhamés Jiménez, declaró después de la sentencia de la Corte que el
expresidente está preparado para encarar en los tribunales la campaña que sus
enemigos han desatado en su contra.
Jiménez fue procurador general de la República los últimos seis años del
gobierno de Leonel, y ha sido su abogado en el proceso incoado por Moreno por el
delito de lavado de activos y enriquecimiento ilícito, acusación que también
involucra a la fundación Global.
“Como se trata de una perversidad política, hija de la envidia y la
frustración, estamos preparados para seguir defendiendo al presidente Fernández
de estas acusaciones maliciosas...”
Junto a Jiménez se han incorporado voluntariamente a la defensa del
exmandatario unos 60 abogados que en cada audiencia llenan las salas donde ha
sido conocida la acusación.
¿Cómo te quedó el ojo, forastero?Ya Moreno venía con el ojo
amoratado desde el fracaso de su convocatoria del domingo en el parque
Independencia junto a otras tantísimas siglas sin oficio --y sin gente, por
supuestoópara protestar contra la corrupción y exigiendo ¡que el gobierno pare
eso!
La sentencia se produjo el lunes, apenas algunas horas después de ese
fracaso.
Los desaguaderos digitales tan afines a esa “lucha” atribuyeron la escasa
concurrencia “a los torrenciales aguaceros” caídos sobre la ciudad la tarde del
domingo.
La verdad es que ese día cayó apenas “una jarinita”, por lo que el fracaso se
debió al escaso apoyo que tiene esa campaña contra Leonel y Danilo.
A la “manifestación” del domingo fue tanta gente como convocantes tuvo. Se
podían contar los asistentes y no llegaban al medio centenar que se dispersaron
muertos de la vergüenza en menos de una hora.
Aún así, tuvieron el tupé óempezando por el doctor Morenoó de decir al día
siguiente que aquello fue “todo un éxito” y que la plaza no se abarrotó debido a
las lluvias.
Los amigos le han recomendado al doctor Guillermo Moreno que dedique su
tiempo a cosas más útiles... ¡Para que crezca políticamente!.